Ciruelas
De particular color morado intenso en su suave piel. Al morderla nos encontramos con una carnosa pulpa de matices que combinan amarillos, naranjas y rojos. Su sabor, exclusivo y singular, dulce en un principio con un último deje ácido. Así son nuestras ciruelas, interesantes y seductoras.
Simplemente deliciosas, jugosas y frescas. Estas frutas son ideales para disfrutarlas en un día de calor, ya sea solas como combinadas con otros frutos.
Nos encanta comerlas con la mano y sentir su exquisito jugo estallar en nuestro paladar. Una rutina infalible en días de verano.
Las ciruelas nos regalan un fantástico contraste tanto de sabores como de texturas. Su amarga y rígida piel se opone a su dulce y suave pulpa generando sensaciones inigualables para todo amante de las frutas.
Conservación
Recomendamos colocar aquellas ciruelas que aún no han madurado fuera de la heladera a temperatura ambiente hasta que se cedan al tacto. Una vez maduras se deben situar dentro del refrigerador por no más de 5 días.
Es importante destacar que son frutas extremadamente perecederas por lo que deben ser consumidas en un corto lapso de tiempo.
Nutrición
- Gran aporte de Agua y Fibras.
- Ricas en Potasio.
- Propiedades antioxidantes. Acción laxante. Evitar consumo con malestar estomacal.