Apio

La planta de apio es un elemento básico para cualquier cocinero, peculiar por donde se lo mire. Por un lado, un particular sabor suavemente amargo con tintes puros y campestres; por el otro, una textura tan crujiente que se percibe a través de su verde color.

La versatilidad es otra de sus virtudes. Tanto crudo en ensaladas y aderezos, o bien, cocido en salteados, salsas o sopas, un toque de este vegetal es suficiente para aportar contrastes e incertidumbre a todo tipo de paladares.

Disfrutamos de mezclar sabores al combinar plantas de apio con otros vegetales más dulces como zanahorias, calabazas y batatas. Lo crepitante de su tallo se opone a la suave textura de las demás verduras creando una explosión única e irresistible.

Por otro lado, sus hojas intensamente verdes y amargas, son ideales para dar colores vivos y nuevos sabores a nuestras ensaladas.

Conservación

Para conservarlo correctamente, aconsejamos colocarlo dentro de la heladera cubierto de un envoltorio por no más de 5 días.

Nutrición

• Muy bajo aporte de calorías.
• Alto contenido de Agua y Potasio.